Cuando el hada Shanin subía sobre el lomo del ave Piken, sus pequeños brazos empezaban a temblar, estaban llenos de felicidad.Shanin comenzó a jalar de las pequeñas plumitas del ave Piken y emprendían vuelo. Era tan emocionante surcar los cielos, esquivar una que otra ventisca y una que otra ave entrometida, tomar velocidad, la velocidad mas veloz de todas y poder dar gritos de libertad.
En una de sus aventuras, cuenta que Shanin quedo atrapada entre dos ramitas de olivo, eso suele pasar cuando se toma velocidad, la velocidad mas veloz de todas, te quedas atrapado entre dos ramitas de olivo, asi que mucho cuidado con el olivo cuando vayas volando a la velocidad mas veloz de todas.
Shanin no sabia como escapar, el ave Piken por mas esfuerzo que hacia por salir, solo terminaba enredándose mas entre ramas y hojas. Es así como conocieron al Sr. Ruper, una pequeña ardilla que tenia por hogar un árbol de olivo. Si, ese árbol de olivo donde Shanin y Piken habían caído.
Conmocionado el Sr. Ruper por tales golpazos que hacían estremecer todo el árbol, fue en busca del causante. Fue entonces tal sorpresa cuando vio una pequeña hada atrapada con un ave entre las ramas. A los animales les encantan esos encuentros con hadas, especialmente al Sr. Ruper.
- ¡Que pasó por aquí! - Exclamo el Sr. Ruper. Entonces Shanin con dulce voz respondió - Oh disculpe usted Sr. Ardilla, fuimos volando y entonces caímos, quedando así, atorados entre ramas- El Sr. Ruper al ver ciertamente lo acontecido preciso en ayudarlos. Libres ya Shanin y Piken agradecieron tan amable ayuda.
El Sr. Ruper, tan amable él, los invito a tomar el té. Sí, las ardillas toman té de vez en cuando, y el mejor de todos es de los que sabe hacer el Sr. Ruper, secreto de familia dice él. Shanin y Piken aceptaron gustosamente y es así como se conocieron, es así como una nueva aventura estaba por comenzar. Claro, un nuevo amigo siempre trae consigo una aventura nueva, pero esta ya será otra historia.
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